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*Cumplí el sueño de ser director: Rivera Soto *Decano enseñando derecho penal por 52 años *Celular un distractor para estudiantes *De las Casas me dibujaba


Por: Redaccion 28 Abril 2018 07:45

La Entrevista:

El decano de Derecho de la Universidad Autónoma de Chihuahua, Luis Alfonso Rivera Soto, se mostró feliz por haber ocupado el puesto de Director interino de su Facultad, un sueño largamente acariciado, externó.

“Pensé que duraría tres o cuatro meses pero por fortuna el interinato se prolongó por casi un año y medio”, agregó emocionado el sempiterno maestro que por 52 años ha impartido la cátedra de derecho penal y que cuenta con una larga trayectoria profesional dentro y fuera de la UACh.

Preocupado por el comportamiento de los jóvenes en las aulas, dijo a tiempo.com.mx y a puentelibre.mx, que en la actualidad el abuso en el uso del teléfono celular, representa un distractor para los estudiantes y se mostró a favor de restringir su uso en las clases.

Opinó que debe actualizarse el Código Penal para sancionar las nuevas conductas delictivas y para analizar el contenido obsoleto, también recordó a su amigo Reyes Humberto De las Casas Duarte, con quien mantuvo una relación de amistad y compañerismo hasta que falleció.

Me dibujaba en forma de caricatura en los pizarrones y les tuve que aclarar a los alumnos que era su forma de reconocer la admiración que sentía por mí, claro que fuimos grandes colegas.

El exprocurador en tiempos del gobernador Óscar Ornelas, Subdirector de Gobernación con Óscar Flores y Director de Profesiones con Don Manuel Bernardo Aguirre, empezó la entrevista así: Mi nombres Luis Alfonso Rivera Soto y soy originario de Chihuahua.

Mi padre fue Juan Rivera Acosta y mi madre María Soto de Rivera, mi papá nació en Jiménez y mi mamá en Durango.

Fuimos seis hermanos, de los cuales ya han fallecido cuatro, quedamos el más chico, Tito Andrés y yo.

Estoy casado con Ethel Garza Armendáriz desde hace 10 años en segundo matrimonio.

Mis hijos mayores son Luis Alfonso y Juan Alejandro Rivera Campos, ambos son abogados.

El más chico, Alán Fernando Rivera Garza, está estudiando en la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Chihuahua, en el primer semestre.

La educación primaria, la secundaria y la preparatoria, las estudié en el Instituto Regional de Chihuahua que era un Colegio de Jesuitas.

Radicamos en la calle Allende 1208 y en las calles Aldama y 14ª., cerca de donde ahora es el Bachilleres Uno.

Soy de las primeras generaciones de egresados de la Universidad Autónoma de Derecho.

Entré cuando se instauraron las escuelas de Derecho, Ingeniería y Medicina y recuerdo haber tenido clases en la Quinta Gameros.

En ese tiempo el Director de la Escuela de Derecho era el licenciado José R Miller Hermosillo quien después fue Rector de la UACh.

¿A quien recuerda de sus compañeros?

Con mucho afecto al licenciado Reyes Humberto De las Casas, un excelente amigo de siempre. Fue maestro, director y rector.

Lamentablemente el falleció hace algunos meses, pero lo recuerdo con mucha amistad.

También al licenciado Héctor Villasana, a Rodolfo Acosta Muñoz, a Jesús Manuel Erives, ellos fueron con quienes conviví, también Víctor Aguirre Castorena, ya fallecido lamentablemente.

Siempre he sido litigante, pero mi primer trabajo fue defensor de oficio adscrito a los juzgados del ahora Tribunal Superior de Justicia del Estado.

En esos años se le llamaba Supremo Tribunal de Justicia del Estado y el presidente era el licenciado Carlos González Pérez.

Fui director de la Escuela de Policía del municipio en el tiempo del alcalde José Luis Caballero.

Asimismo estuve como Subdirector de Gobernación en los tiempos del licenciado Oscar Flores Sánchez.

Ocupé la Dirección de Profesiones en los tiempos del gobernador Don Manuel Bernardo Aguirre.

También Procurador General de Justicia en el Estado con el gobernador Óscar Ornelas Küchle.

Terminando ese periodo me regresé a litigar y ocupé muchos años la Secretaría de la Facultad de Derecho.

Recuerdo cuando la Escuela se transformó en Facultad de Derecho con Oscar Flores.

En los tiempos del Rector José Luis Franco ocupé la Secretaría General de la UACh.

Tengo 52 años como maestro en Derecho, he visto pasar a miles de universitarios.

Entre los abogados que recuerdo está Jesús Manuel Erives, y una abogada muy brillante cuyo nombre no recuerdo, que llegó de Tijuana y que ha sido la alumna más destacada que he tenido.

Ocupé la Secretaria de la Facultad con Juan José Royo Provencio, con Augusto Martínez Gil, Don Saúl González Herrera.

Entre los directores más destacados también se encuentra el licenciado Reyes Humberto De las Casas Duarte, el licenciado Saúl Martínez Campos y Mario Trevizo Salazar.

Mi asignatura casi siempre ha sido el derecho penal, principalmente es lo que me ha gustado impartir, pero también di Seminario de Cultura Jurídica.

Me tocó ser maestro adjunto del licenciado Mauro Antonio Rodríguez Leggi quien también fue director interino de la escuela y presidente del entonces Supremo Tribunal de Justicia del Estado.

En los años que participé como Procurador General de Justicia del Estado fundamentamos una actualización al Código Penal del Estado de Chihuahua.

Por disposición del gobernador Ornelas se realizó una convocatoria en todo el estado y se visitaron casi todos los municipios.

Ciudad Juárez, Casas Grandes, Parral, Delicias, Camargo y Cuauhtémoc entre otros, donde nos reunimos con todas las agrupaciones de abogados.

Hubo muchas propuestas que fueron recogidas y que se cristalizaron en un Código Penal vigente y trascendente, que recogió las últimas ideas criminalísticas locales, nacionales e internacionales.

Esta modificación permitió que contáramos con un Código actualizado muy eficiente que lógicamente tiempo después fue rebasado y se ha tenido que reformar.

La nueva gama de delitos obliga a la autoridad a aplicar el Código ya actualizado pero donde quedan por analizarse nuevos ilícitos.

En la cuestión del narcotráfico debe darse una revisada acerca de las manifestaciones e implicaciones de este delito y las penalidades.

¿Está la propuesta de despenalizar el tema de la marihuana?

En el caso de la marihuana se plantea que se establezca la despenalización para casos muy concretos.

Está la propuesta de que se apruebe el uso medicinal del enervante o incluso sea legal en ciertos casos para recreación.

Sin embargo debo comentar que con el nuevo Sistema de Justicia Penal, implementado desde enero de 2011, llegó la renovación a Chihuahua.

Falta que se termine de reestructurar y se aplique el nuevo Código, ya no se puede estar laborando en el caso de los tribunales, por medias jornadas.

En la actualidad se requiere trabajar de mañana y de tarde y hay muchos tribunales que descansa el turno vespertino.

Esto forma un rezago que se va incrementando por lo que se hace necesario poner a trabajar tiempo extra a los jueces y su personal.

¿Qué es lo más importante en materia penal?

Además de lo que mencioné, urge aplicar un esquema integral de Justicia Alternativa o de acciones conciliatorias.

Lamentablemente se le ha dado muy poca importancia porque en algunos casos quienes ocupan esos puestos carecen de capacidad de negociación.

Generalmente esos cargos son ocupados por abogados, pero seria de la opinión de que estuvieran complementados con otro tipo de profesionales como psicólogos o sociólogos.

Ellos tienen visiones diferentes a los abogados eliminando denuncias por asuntos pequeños para despresurizar los tribunales como lo son algunos delitos patrimoniales, de robo, fraudes o abusos de confianza.

La lesiones leves de no ponen en peligro la vida, tardan menos de 90 días en sanar, y no dejan consecuencias medico legales, serian materia de esta tipo de conciliación.

Pese a que algunos delitos no son trascendentes, generalmente obligan a que se realice todo el procedimiento.

Sería conveniente tener un excelente sistema de negociación, de conciliación para llegar atajar los asuntos que carecen de importancia para la sociedad en general.

Claro que en el caso de las víctimas cualquier tipo de delito por menor que sea, tienen la mayor importancia.

Sé que se han realizado esfuerzos por multiplicar la atención de los delitos, pero la criminalidad se ha incrementado en los últimos años.

¿Hasta cuándo va a dar clases?

El contacto con la juventud nos renueva constantemente, con salud y del espíritu.

Hace 20 años los jóvenes y adolecentes no tenían el comportamiento que observan los de ahora.

Ahora se ha perdido un tanto el respeto, pero también hay muchachos valiosos.

El uso del teléfono celular ha sido algo que nos perjudica a los docentes al grado de que si uno de mis alumnos contesta una llamada o se sale para atenderlo, le pongo falta.

¿Qué recuerdo nos quiere compartir?

Por cierto el licenciado De las Casas me caricaturizaba plasmando mi imagen en el pizarrón y como defensa les expliqué a los muchachos que lo hacía porque me admiraba, que yo era su superhéroe.

Me decía bromeando Rivera Soto policía, Rivera Soto procurador, y que yo no sabía contestar las dudas de los alumnos, entonces aproveché para decirles que me criticaba porque me admiraba.

Cuando somos niños, les comenté, dibujamos a nuestros héroes como yo dibujé a Batman, a Superman y así Reyes lo hace conmigo.

Reconozco el trabajo que está realizando el Rector Luis Fierro en su objetivo de modernizar nuestra Alma   Mater.

Será un importante impulsor de la investigación…

También felicitó al Dr, Roberto Díaz Romero, por su arribo a la Dirección de la Facultad.

¿Le tocó como decano de la Facultad, asumir el cargo de Director?

La Anécdota:

Así fue, pero quiero contar esta historia, en 1980 cuando el licenciado Reyes Humberto De las Casas, era el Rector de la UACh, le hice saber mi interés en ser director.

Me indicó que le presentara un Plan de Trabajo para luego proceder a la propuesta.

Cuando terminé el documento, me llamó el licenciado Óscar Ornelas para designarme Procurador General del Estado.

Para mí eso se convirtió en un conflicto, por un lado la Procuraduría General de Justicia y por el otro la Dirección de la Escuela.

Como estaba muy empapado de la cuestión penal, opté por aceptar la invitación del señor gobernador.

Mi sueño se frustró aparentemente, porque con el paso del tiempo, en 2016 se generó un conflicto en la Facultad.

El procedimiento es nombrar al Decano como Director de la institución y por fortuna era yo.

Se cumplió mi sueño de ser director de mi amada escuela y aunque pensé que lo sería por tres o cuatro meses, permanecí por más de un año.

Ha sido una hermosa profesión la abogacía, pero más hermosa actividad, ser el director.

Creo que es lo mejor que le puede pasar a un universitario, salvo ser rector, me imagino.

Es tan intensa la actividad como director que dejé de atender mi despacho durante el tiempo que estuve.

Lo que nunca he dejado son mis clases, siempre he estado al pie del cañón…

Mi experiencia más grata como director, fue haber asumido la responsabilidad cuando la Facultad atravesaba por un conflicto por temas de carácter electoral.

Haber manejado y entregado al nuevo director, una escuela tranquila, con un buen ambiente laboral, con maestros y jóvenes dedicados a la docencia y el estudio.

No se generó ningún problema político, me convertí en un moderador, más que en un director, porque el merito de la tranquilidad se debió a tres factores.

A los maestros, a los estudiantes y a los trabajadores.

Existe un excelente equipo de trabajo que apoya al director y permite llevar en armonía a la Facultad.

Como dijo un maestro alguna vez, la época de los Césares ha terminado y ahora estamos en la de los Centuriones, donde todos nos necesitamos.

El Cuento:

En aquel tiempo que actualizamos el Código Penal se trató de derogar el adulterio pero sucedió algo muy especial.

En una declaración que hice al periódico en el sentido de que apoyaba la derogación de ese ilícito, ya que no respondía al bien protegido que era la moral.

Entonces llegó una señora muy enojada y pidió audiencia conmigo y al atenderla ella me reclamó que al eliminar el adulterio como delito, “usted lo que quiere es proteger a sus amigos para que sigan infringiendo la norma jurídica”, externó molesta.

Le dije que era una opinión valiosa pero no el fundamento jurídico, porque el delito del adulterio ya no respondía al orden familiar.

Es uno de los pocos delitos que se comprueban con pruebas presuntivas no con una prueba directa e inmediata.

Afortunadamente quedaron fuera posteriormente, también las calumnias, la difamación y la venta de bebidas alcohólicas fuera de horario, que es una falta administrativa solamente.


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