Litigantes tenemos mucho que aportar a la justicia: Cecilia Gaytán

Durante una entrevista, Gaytán Montoya compartió que su campaña ha estado enfocada en fomentar la participación ciudadana y concientizar sobre la relevancia del proceso: “Se ha intentado que la ciudadanía lo asuma como propio, porque no tenemos otra opción y por la importancia que reviste el mismo”, explicó. Reconoció que persiste un clima de incertidumbre y desinterés entre la población, pero hizo un llamado a acudir a las urnas este 1 de junio: “La democracia debe concretarse, no sólo presumirse. Es un derecho y también una obligación”.

Una trayectoria construida desde la congruencia

Originaria del estado de Chihuahua, Gaytán Montoya es licenciada en Derecho por el Tecnológico de Monterrey, campus Chihuahua, y maestra en Derecho Político y Administración Pública por la Universidad Autónoma de Chihuahua. A lo largo de su carrera, ha combinado el ejercicio profesional con la función pública, destacando su paso por el Tribunal Colegiado en materias penal y administrativa, así como su trabajo como litigante durante más de 15 años. También se desempeñó como subdirectora de Normatividad y Asuntos Jurídicos del Instituto Chihuahuense del Deporte.

“Soy una mujer de convicciones y de profunda congruencia. Para mí, la educación ha sido un pilar fundamental que abre puertas y transforma realidades”, expresó.

Motivada por un fuerte compromiso social con la justicia, Gaytán Montoya explicó que decidió participar en el proceso de selección inspirada por la jueza Ruth Bader Ginsburg, magistrada de la Suprema Corte de Estados Unidos, conocida por su lucha en favor de los derechos civiles y de las minorías. “Ella nos hizo ver que es necesario un nuevo protagonismo en la impartición de justicia, más dinámico, menos acartonado. Toda evolución social implica también la evolución del derecho”, comentó.

Justicia con enfoque de derechos humanos

La candidata resaltó que, en el ámbito civil, es crucial aplicar criterios con perspectiva de género, infancia y minorías. Subrayó el impacto del caso “Campo Algodonero” resuelto por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que señaló la existencia de una desigualdad estructural en México. “Eso nos obliga a contar con un criterio más sensible, activo y cercano a la sociedad, y a no aplicar la ley de manera estricta sin considerar la realidad de los casos. Hoy debemos integrar protocolos y estándares nacionales e internacionales para impartir justicia de manera más humana”, afirmó.

Una visión desde el litigio

Ante la pregunta sobre la diferencia entre jueces con carrera judicial y aquellos que provienen del litigio, como es su caso, Gaytán Montoya fue enfática: “Respeto profundamente la carrera judicial. Pero también es valioso que hoy el proceso abra la posibilidad a perfiles que, como el mío, han estado durante años del otro lado de la barra, en contacto directo con la ciudadanía y con la realidad que se vive en los tribunales”. Considera que esa experiencia le permite tener una visión más integral y empática sobre la impartición de justicia.

Finalmente, Gaytán Montoya invitó a la población a reflexionar sobre la relevancia de elegir a quienes estarán al frente de los juzgados en los próximos ocho años. “No se trata sólo de una elección más, se trata de fortalecer el tejido social desde la justicia”, concluyó.