“Abrazos, no balazos” generó violencia en Guadalupe y Calvo: Vázquez

El legislador adjudicó el panorama de inseguridad a la denominada estrategia de «Abrazos, no balazos» que implementó durante su sexenio el exgobernador Andrés Manuel López Obrador, que permitió a los cárteles del narcotráfico aumentar su poderío no sólo en la Sierra Tarahumara, sino en el resto del territorio nacional. 

«Todo es consecuencia de la política de “Abrazos, no balazos” del actual gobierno, de la cual no se ha desligado por completo la presidenta actual. De ahí deriva toda esta situación de empoderamiento de estos proclamados grupos criminales que desplazan personas desde diversos municipios y estados del país», argumentó Vázquez Robles.

En cuanto a la gestión de Ana Laura González Ábrego, alcaldesa de Guadalupe y Calvo, el congresista hizo énfasis en que su administración debe de solicitar a la Federación el apoyo de la Guardia Nacional y combatir así los delitos de alto impacto en la zona serrana, donde cientos de familias se han visto en la necesidad de abandonar sus hogares para protegerse de los grupos criminales. 

«Es muy triste para nosotros que esté pasando esto y que la presidenta municipal no sea capaz de hacer un llamado al Gobierno Federal actual. […] Se requiere de una presencia mucho más auténtica», dijo. 

En su modo de ver, México no ha alcanzado la condición de estado fallido, sino que funciona para los intereses de los grupos criminales y los servidores públicos coludidos. Y juzgó que este caso corresponde al caso de Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad Pública del Estado de Tabasco durante el mandato de Adán Augusto López Hernández.