Modern Warfare; el lado más explícito de la guerra

La campaña del juego toca muchos temas sensibles,con un sinfín de atentados terroristas, la invasión de un país, la toma de rehenes e incluso la tortura manera explícita y presuntamente realista.
Por: Redacción 01 Noviembre 2019 14:22
En principio la campaña nos pone al mando de un grupo de soldados de nacionalidades mixtas, incluyendo la CIA de Estados Unidos, la SAS británica y rebeldes de la nación ficticia de “Urzikstan”, la cual se encuentra invadida por soldados rusos al mando de un macabro general, desde hace más de una década.
Los momentos de flashback del juego, por ejemplo, son realmente duros de vivir y dignos de una historia bélica dura y cruda, además de que la calidad de las imágenes lo acentúa.
Constantemente vamos cambiando de personaje a lo largo de la campaña, que dura aproximadamente 7 horas, mientras llevamos a cabo misiones en distintos territorios, incluyendo en Rusia, Londres y, por supuesto, Urzikstan.
Tradicionalmente un Modern Warfare tiene algún tipo de polémica relacionada a su campaña y la forma en la que plasma los conflictos bélicos, sobre todo cuando están inspirados en eventos de la vida real.
Ya lo vimos con la misión del aeropuerto en Modern Warfare 2, y el nuevo Modern Warfare también tiene su buena dosis de crueles misiones, pues suelen inspirarse en conflictos bélicos reales pero modificando la historia, colocando a otro bando o nación como los villanos (el ejército ruso no tiene una buena imagen en el juego), o inspirándose en atentados terroristas reales como los que vivió Londres hace pocos años.
La razón de esto, según explicaron en incontables ocasiones desde Infinity Ward, es ofrecer una experiencia bélica “más realista” que en varias ocasiones se siente perturbadora, mostrando que las acciones de los supuestos “héroes” de las guerras no suelen ser nada limpias ni moralmente éticas.
Según uno de los personajes del juego, el legendario Capitán Price que regresa otra vez a un Modern Warfare, la razón es sencilla: en la guerra, “los soldados tenemos que ensuciarnos para que el mundo se mantenga limpio”.